Por qué usar Blastoactiva después de un tratamiento estético
Un tratamiento estético puede dejar marcas en tu piel, por lo que es importante cuidarla antes y después de realizar cualquier proceso en ella. Los efectos secundarios pueden ser mayores si tu piel no está en las condiciones idóneas, se muestra deshidratada y/o presenta agresiones importantes. Utilizar una crema como Blastoactiva®, que hidrata, activa, repara y renueva las pieles agredidas, nos ayudará a mantenerla saludable para afrontar los tratamientos estéticos que deseemos.
¿En qué casos de uso está indicado Blastoactiva?
- Irritaciones en la piel. Las irritaciones pueden deberse a distintas causas como el frío, la sequedad, el viento, la contaminación… Los síntomas más comunes son el enrojecimiento y el picor, que se agravan con el rascado. Blastoactiva® activa, repara y renueva la epidermis, reduciendo esta sintomatología tan molesta.
- Agresiones superficiales. La epidermis es la capa más superficial de la piel, por lo que está continuamente sufriendo las inclemencias del tiempo y demás agresiones físicas o químicas.
- Eritemas solares. La exposición al sol puede provocar quemaduras en la piel que causan enrojecimiento, dolor y descamación; la utilización de una crema hidratante y dermoreparadora, como Blastoactiva®, favorece la disminución de la inflamación asociada al eritema solar y potencia el proceso de renovación celular, que nos ayudará a reducir las molestias ocasionadas y acortar el tiempo de reparación de la piel.
- Afeitado y depilación. El afeitado y la depilación son técnicas que repetimos continuamente sobre la piel, provocando pequeñas irritaciones en ella y dejándola con un aspecto seco; tanto sea con cuchilla como a cera, una crema reparadora e hidratante nos ayudará a fortalecer nuestra piel y facilitar su recuperación tras la depilación.
- Marcas de acné superficiales. Las pequeñas cicatrices superficiales ocasionadas por el acné pueden tratarse con una buena hidratación y una crema que ayude a reducir las marcas superficiales y mantener la función barrera de nuestra piel.
- Tratamientos estéticos. Ya sea en casa o en centros estéticos, solemos aplicar tratamientos cosméticos en nuestra piel que pueden ser muy agresivos y debilitar la barrera dermocutánea; los efectos secundarios de estos tratamientos pueden no ser visibles en un primer momento, pero es importante cuidar nuestra piel tras una sesión de este tipo para evitar problemas futuros.
Principales tratamientos estéticos
- Depilación láser. Este tipo de depilación consiste en la eliminación permanente del vello mediante la utilización de láseres que queman el folículo piloso; la emisión del haz de luz será absorbido por la melanina presente en el folículo piloso, transformándose en calor y produciendo su fototermolisis selectiva, y por tanto eliminación, del folículo capilar. Dependiendo del tipo de pelo y de piel se recomienda un tipo de láser: alejandrita, rubí, diodo, etc, pero en todos los casos, la piel se mostrará enrojecida y sensible tras las sesiones.
- Peeling. Existen peelings físicos y químicos dependiendo del método con el que eliminemos las capas dañadas de la piel. También conocido como dermoabrasión o exfoliación química; esta técnica se utiliza para suavizar y mejorar la piel, facilitando el desprendimiento de las células muertas de la piel, que se muestra más seca y mate, y favoreciendo la reparación desde las capas más profundas de la dermis.
- Rayos UVA. Los rayos UVA nos broncean y dan un aspecto luminoso y saludable a nuestra piel, pero hay que destacar por encima de todo que la exposición excesiva puede provocar envejecimiento prematuro, eritemas,
descamaciones, etc. Una crema reparadora que active y renueve la epidermis tras las sesiones puede
ayudarnos a prevenir rojeces y descamaciones indeseadas. - Post-intervenciones médico-estéticas. Las cicatrices provocadas por las intervenciones de este tipo tienen que cuidarse porque pueden quedar cicatrices hipertróficas o marcas muy visibles debido a un mal cuidado de la herida. Una crema reparadora dermocelular que renueve la epidermis puede ayudarnos a que los resultados sean los deseados.
Blastoactiva para después de un tratamiento estético
Los efectos secundarios de los tratamientos estéticos son muy variados, e incluso, a veces, imprevisibles: eritemas, descamación, picor, hiperpigmentación, cicatrices hipertróficas…
Las pieles agredidas presentan una alteración de la barrera cutánea, facilitando la pérdida de agua y la aparición de inflamación.
Blastoactiva®, Reparador Dermocelular con Centella Asiática actúa ante un desequilibrio de la barrera protectora, reparando la epidermis, aliviando las irritaciones y restableciendo la función barrera. Blastoactiva® de Almirall contiene dos ingredientes activos procedentes de la Centella Asiática: el Asiaticósido y el Ácido Asiático, que tienen función antiinflamatoria y dermoreparadora, por lo que son el remedio perfecto para el periodo post-tratamiento. Además, hidrata nuestra piel, manteniéndola en el estado idóneo para afrontar las agresiones externas diarias.
Una piel sana nos ayudará a prevenir futuros problemas cutáneos, por lo que no dudes en utilizar una crema con función dermoreparadora tras recibir un tratamiento estético que haya agredido tu piel.
José Pascual Albert
Farmacéutico – Nº 9818